Policías se niegan a reprimir protestas en Honduras

Cientos de agentes policiales de Honduras se negaron este lunes a hacer cumplir el estado de sitio y a reprimir a manifestantes de la oposición, que denuncian un fraude en las elecciones del 26 de noviembre.

Miembros de los “Cobras”, el escuadrón especial antimotines, apoyados por policías preventivos, salieron de sus barracas en el norte de la capital, para expresar su negativa a reprimir manifestantes y a hacer cumplir el toque de queda, tras una ola de manifestaciones post electorales que terminaron en violentos enfrentamientos.

“En estos momentos estamos de brazos caídos (…), para manifestar nuestra inconformidad por lo que está pasando a nivel nacional. Nosotros somos pueblo y no nos podemos estar matando con el propio pueblo, nosotros tenemos familia”, dijo un portavoz de los manifestantes, de acuerdo con la agencia EFE.

Honduras vive momentos de tensión tras los comicios del 26 de noviembre, en las que el presidente derechista Juan Orlando Hernández buscó la reelección ante una oposición de izquierda fortalecida con el liderazgo del derrocado expresidente Manuel Zelaya y el presentador de televisión Salvador Nasralla como candidato presidencial.

Aunque la Constitución de Honduras prohíbe la reelección presidencial, Hernández se postuló a un segundo mandato gracias a un polémico fallo de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia que le dio el visto bueno.

Los temores de fraude vienen desde la elección pasada, en 2013, cuando Hernández venció a Xiomara Castro, esposa de Zelaya, gracias al control del TSE por parte de Hernández.

Las sospechas de fraude provocaron amplias movilizaciones de opositores a Hernández, que la semana pasada derivaron en violentos choques con la policía, que dejaron al menos una joven muerta, y saqueos de negocios en varias ciudades del país.

Incluso, dos policías murieron en Honduras atacados a tiros por desconocidos durante el toque de queda decretado para frenar movilizaciones violentas de la oposición, en medio de las convulsas elecciones del país centroamericano.

El portavoz policial Jair Meza relató a la AFP que la noche del domingo los policías se conducían en una patrulla en el oriental departamento de Olancho y “en cumplimiento al toque de queda requirieron a dos individuos que iban en otro vehículo”.

(Con información de agencias).