El priista Miguel Ángel Riquelme tomó protesta este viernes como Gobernador de Coahuila para el periodo 2017-2023 en el Congreso estatal, después de un largo conflicto postelectoral.
El Congreso local arrancó a las 8:30 horas cuando el diputado presidente de la Mesa Directiva del Congreso, Sergio Garza Castillo, del partido estatal UDC, declaró iniciada la sesión solemne con el quórum necesario para ser legal.
Referente a la contienda electoral, Riquelme dijo que durante proceso posterior a la elección, “hubo quien intentó dividirnos, pero confié en la voluntad, el voto efectivo y en la solidez de las instituciones. Esos que quisieron dividir se equivocaron”.
Durante su toma de protesta, el priista prometió garantizar la seguridad de los coahuilenses, aumentar el desarrollo social y además dijo que reducirá gastos dentro de las dependencias para generar ahorros.
Coahuila es el tercer estado más endeudado del país, únicamente después de la Ciudad de México y Nuevo León, con una deuda pública mayor a los 36,945 millones de pesos, según datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de 2016. Este monto representa el 5.9 por ciento del PIB estatal.
El mayor incremento de la deuda ocurrió en 2011, cuando se llevó a cabo el proceso electoral que ganó el priista Rubén Moreira. La deuda pasó de representar el 2 por ciento al 7.8 por ciento del PIB estatal.
“Voy a gobernar para todos, pero lo que hoy importa es la prosperidad de Coahuila”, dijo. Dedicaré todo mi esfuerzo para cumplir con ello”, declaró Riquelme.
Riquelme también aseguró que no incrementará los impuestos y reiteró a los legisladores que respetará su autonomía y la de los municipios.