Estado Islámico podría usar drones para propagar virus mortales

Extremistas islamistas radicales inspirados por el grupo miliciano Estado Islámico o Al-Qaeda podrían usar drones para propagar agentes biológicos, ha dicho el alto jefe de contraterrorismo de Europa.

Milicianos del EI previamente usaron drones en su batalla para mantener el control de la ciudad oriental siria de Al Raqa y la ciudad norteña iraquí de Mosul, especialmente para vigilancia; el grupo usó los dispositivos para ubicar las posiciones del enemigo y dejar caer explosivos sobre las fuerzas enemigas.

Gilles de Kerchove, el coordinador de contraterrorismo de la Unión Europea, alertó que yihadistas locales podrían usar drones en Europa para dejar caer armas biológicas sobre espacios públicos abarrotados.

Él dijo que internet está permitiendo que islamistas radicales fuera de Irak y Siria tengan acceso a contenido extremista publicado en línea, refiriéndose a tecnología de vanguardia.

Kerchove dijo el viernes en una conferencia en el Instituto Real de Servicios Unidos, un grupo de expertos en defensa domiciliado en Londres, que la siguiente preocupación de los servicios de seguridad tras la pérdida de territorio del EI en Irak y Siria es que un solo individuo pueda perpetrar un ataque con enormes fatalidades en Occidente.

“Probablemente es más fácil ahora que antes el que un actor solitario perpetre un ataque de consecuencias catastróficas, y algunos de ellos han aprendido mucho en el ampo de batalla”, comentó el funcionario.

“¿Recuerdan la revistaInspire?”, preguntó él, refiriéndose a la revista propagandística de Al-Qaeda. “En el primer número, tuvimos un artículo sobre cómo hacer una bomba en la cocina de tu mamá”, haciéndolo preguntarse si era demasiado pronto para creer que dentro de poco habría un “artículo similar sobre cómo procesar un virus en la cocina de tu mamá”.

Kerchove alertó sobre los peligros de la radicalización, diciendo que podría haber una persona quien simpatice con las ideas radicales y tenga “un doctorado en biotecnología sintética”.

Refiriéndose al grupo miliciano chiita libanés Hezbolá y al EI, ambos conocidos por su uso de drones, Kerchove advirtió que actores solitarios podrían usar “drones con una sustancia química en un estadio”.

Un ataque semejante les dificultaría a las autoridades el detectar el complot y al perpetrador, ya que los operadores de drones pueden hacerlo desde muy lejos.

Los reporteros asignados a las fuerzas militares iraquíes han documentado ataques del EI con drones cerca de Mosul. Los ataques son rápidos, difíciles de prevenir, difíciles de detectar y vienen del cielo, por lo que no es sencillo defenderse contra ellos.

Los drones alteraron la dinámica del campo de batalla en tiroteos sangrientos de casa a casa, pero en Europa posiblemente se enfocarían en ataques sorpresa contra objetivos indefinidos, en especial civiles, el objetivo principal en años recientes de los partidarios de los yihadistas.

Los ejemplos más fatales de ataques inspirados y dirigidos por el EI contra civiles incluyen los ataques en París en noviembre de 2015, en los cuales una célula yihadista, con muchos de sus miembros provenientes de Bélgica, entraron a París con armas de fuego y cinturones con explosivos, matando a 130 personas en una sala de conciertos, un restaurante, un bar y un estadio de fútbol; también en Francia, un ataque con un camión en 2016, en el cual un partidario de ISIS lanzó un vehículo contra civiles quienes contemplaban los fuegos artificiales por el Día de la Bastilla en Niza.

Un informe de 2015 del Parlamento Europeo alertó a los estados miembros del bloque a que se “preparen para la posibilidad” de un ataque químico o biológico por parte del EI. Reveló que se reportan 150 casos cada año de contrabando tóxico dentro de las fronteras del bloque.

El informe, titulado “ISIL/Da’esh y armas ‘no convencionales’ de terrorismo”, señaló que hay un “riesgo en especial de que los terroristas podrían usar sarín, ricina o ántrax” en suelo europeo.

Después del asalto a París, Manuel Valls, por entonces el primer ministro francés, advirtió que el país podría enfrentar un ataque químico o bacteriológico en su territorio. “No debemos descartar nada”, dijo él. “Lo digo con todas las precauciones pertinentes. Pero sabemos y tenemos en mente que también hay un riesgo de armas químicas o bacteriológicas”.

Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek