Jesús Campos no tenía arma de fuego cuando encontró la habitación desde la cual Stephen Paddock perpetró una de las peores matanzas en la historia de Estados Unidos. El guardia de seguridad aún desarmado se aproximó a la habitación 32-135 del hotel Mandalay Bay y pese a resultar herido ayudó a evitar una tragedia mayor según han reconocido las mismas autoridades.
Paddock había colocado cámaras en el pasillo y en la mirilla de la puerta lo que le permitió ver a Campos aproximarse. Por ello disparó a través de la puerta causándole una herida en la pierna al guardia, dijo a The Daily Beast Dave Hickey, presidente de la International Union, Security, Police and Fire Professionals of America, un sindicato que representa a Campos y a cientos de guardias de seguridad en Mandalay Bay.
Lesionado, Campos se comunicó por radio e informó sobre su localización y la de Paddock. “Recibimos información a través de su centro de avisos… que nos ayudó a localizar donde esta persona estaba”, comentó el Sheriff del Condado de Clark, Joseph Lombardo, a la prensa.
Jesús llegó por primera vez al piso 32 a través del ascensor ya que Paddock tenía bloqueadas las puertas de las escaleras que conducían al pasillo en donde estaba su habitación. La puerta de la habitación también estaba barricada, como lo constató Campos cuando trató de abrirla, justo antes de que las balas atravesaran la puerta y lo lesionaran, comentó Hickey a The Daily Beast.
Al arribo de la policía, Campos los ayudó a ir de puerta en puerta, despejando habitaciones hasta que se le ordenó salir porque estaba herido, según relató Lombardo. Alrededor de una hora después de que Paddock dejara de disparar, un equipo SWAT hizo volar las puertas con explosivos. Paddock fue encontrado muerto dentro.
Sin la acción de Campos, la agitación de los asesinos en masa que mató a 58 personas podría haber sido aún más mortal, consideraron tanto Lombardo como Hickey. “No creo que nuestros oficiales sean suficientemente reconocidos por el valioso papel que desempeñan en la protección de la propiedad, incluso la nación”, comentó.
“Su valentía fue increíble, dio a nuestros oficiales la llave maestra”, dijo por su parte Lombardo quien ante la prensa se mostró sorprendido de que aunque el atacante haya disparado más de 200 balas hacia el pasillo Jesús no haya sufrido lesiones graves. “Es increíble que el guardia de seguridad no sufriera lesiones adicionales”.
Campos, que se está recuperación en el hospital, dijo en declaraciones a la cadena ABC News que se encuentra bien y sobre su hazaña señaló “simplemente estaba haciendo mi trabajo”.