Pakistán lanza fuerte operativo de seguridad tras atentado

El gobierno de Pakistán reforzó su seguridad tras el sangriento atentado suicida que dejó al menos 70 muertos en un santuario sufí en el sur del país.

El atentado reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) ocurrió este jueves en el santuario sufí Lal Shahbaz Qalandar, en la ciudad de Sehwan, a unos 200 km al noreste de la megápolis portuaria de Karachi.

Las fuerzas de seguridad federales y provinciales y la policía lanzaron una vasta operación en todo el país y numerosos sospechosos fueron detenidos en varias ciudades, informó el gobierno.

Al menos 18 “terroristas” murieron en la provincia de Sindh, informaron los Rangers, una fuerza militar auxiliar del ministerio del Interior. Otros 13 “terroristas” murieron en el noroeste del país, según la policía de la ciudad de Peshawar.

Un portavoz del ejército, Asif Ghafoor, consideró que los recientes atentados habían sido planificados desde Afganistán y anunció que el gobierno de Kabul había sido llamado a actuar y entregar a “76 terroristas que se esconden” en ese país.

El ejército anunció asimismo el “cierre” de la larga y porosa frontera entre ambos Estados.

Los países vecinos se acusan mutuamente albergar santuarios de insurgentes extremistas que cometen atentados al otro lado de la frontera.