El cultivo de marihuana en California, la cual tiene una mayor concentración de Tetrahidrocanabinol (THC), principal ingrediente psicoactivo de la planta, ha creado una ruta de contrabando a través de la frontera sur de los Estados Unidos así como un mercado que comienza a causar estragos entre los consumidores mexicanos.
Expertos a ambos lados de la frontera consultados por la cadena californiana KPBS dijeron que la iniciativa para legalizar la marihuana para su uso recreativo en California, la cual será votada el próximo 8 de noviembre, mismo día en que los estadounidenses elegirán presidente, impulsará aún más el contrabando de la cannabis hacia México.
El uso medicinal de marihuana es legal en California desde 1996 y después de rechazar su uso recreativo en 2000, el tema vuelve a ser consultado a la población. Arizona, Nevada, Massachusetts y Maine podrían también unirse a otras cinco entidades federales que ya legalizaron la droga más popular de Estados Unidos, aunque siga siendo ilegal a los ojos del gobierno federal.
La proyección es que el mercado legal de cannabis mueva 7100 millones de dólares y para 2020 supere los 22,000 millones en todo el país, 53 por ciento atribuidos a la venta para uso recreativo, según ha destacado la firma especializada Arcview Market Research. La aprobación en California -que tiene una economía similar a la de cualquier país desarrollado- será clave para conseguir estos números así como para dar un nuevo impulso al movimiento a nivel nacional.
LEE ADEMÁS: La cucaracha quiere caminar.
La KPBS refiere que al igual que es ilegal trasladar marihuana de México a los Estados Unidos, lo es de la Unión Americana a su vecino sur, aunque esta última opción suele más fácil. Por ejemplo, indica que en el Puerto de Entrada de San Ysidro, los conductores pueden cruzar la frontera hacia Tijuana sin la necesidad ser detenidos por un funcionario mexicano.
Las consecuencias de la demanda de este nuevo producto se han visto reflejadas en el Centro de Integración Juvenil de Tijuana, una clínica pública de rehabilitación, donde se ha visto un aumento en los pacientes con adicciones autodescritas a la marihuana de California. En su mayoría son mexicanos con visas o doble nacionalidad que tienen acceso a dispensarios de San Diego o amigos con tarjetas médicas.
“Pueden conseguirla fácilmente en los Estados Unidos, y lo traen con ellos en pequeñas cantidades, generalmente para su propio consumo”, dijo el director de la clínica, Raúl Palacios, a la KPBS. “No dudo que lo compartan con sus amigos, pero no a gran escala”.
Palacios explicó que sus pacientes prefieren la marihuana medicinal de California porque tiene una concentración más alta de THC. Detalló que mientras la marihuana mexicana que vende en las calles de Tijuana tiene una concentración de aproximadamente 2 por ciento de THC, la concentración del producto cultivado en California puede exceder el 30 por ciento.
Sin embargo, esta potencia del producto californiano resulta peligrosa para los nuevos usuarios mexicanos, quienes son más propensos a los síntomas de la psicosis.
El mismos reporte menciona, por ejemplo, que en Colorado, donde el consumo lúdico de la marihuana fue legalizado en 2012, las visitas a las salas de emergencias relacionadas con el consumo de esta droga han aumentado notablemente desde entonces. El aumento más pronunciado se dio entre los visitantes de fuera del estado que no están acostumbrados a la marihuana de alto contenido de THC del estado. Esos usuarios sufren psicosis, accidentes automovilísticos y otros problemas con más frecuencia que los residentes del estado.
“Del mismo modo, los residentes de Tijuana, acostumbrados a fumar marihuana mexicana más débil, pueden tener una menor tolerancia a la marihuana con alto contenido de THC de California”, menciona la KPBS.
A principios de este año, el presidente de México, Enrique Peña Nieto, dijo que estaba abierto a la idea de legalizar la marihuana para uso médico. El gobierno también está considerando descriminalizar la posesión de pequeñas cantidades de marihuana.
Si México legalizara la marihuana se recortarían entre 15 y 26 por ciento los ingresos de los cárteles de la droga del país, de acuerdo con un estudio realizado por el Instituto Belisario Domínguez del Senado mexicano.
El estudio señala que los cárteles mexicanos ganan cada año entre 1000 y 2000 millones de dólares por la venta de marihuana a los Estados Unidos, lo que representa entre un 15 y 26 por ciento de sus ingresos.
Aunque entre 30 y 50 por ciento de la marihuana que entra a Estados Unidos viene de México, el instituto resalta que desde que es legal para fines médicos en 23 estados de la Unión y en otros cuatro para fines recreativos, las ganancias de los cárteles mexicanos han disminuido.