Los programas para prevención del embarazo que utilizan muñecas simulando bebés para disuadir a las adolescentes, podrían tener el efecto contrario, informó un estudio publicado el jueves en la revista médicaThe Lancet.
Los científicos hallaron que más de 1000 jóvenes de entre 13 y 17 años de 57 escuelas de Australia Occidental que participaron en la investigación, mostraron el doble de probabilidad de quedar embarazadas hacia los 20 años que la chicas que asistieron a clases de educación sexual convencionales.
“De hecho, el riesgo de embarazo aumentó respecto de las adolescentes que no tomaron parte en la intervención”, dijo Sally Brinkman, de la Universidad de Australia Occidental, quien dirigió el estudio.
“Cada vez ofrecen más programas parecidos en escuelas de todo el mundo, pero ahora, las pruebas sugieren que no tienen el efecto a largo plazo deseable de reducir el embarazo adolescente”.
Escuelas de 89 países, incluido Estados Unidos, ofrecen clases especiales a sus alumnas adolescentes, conocidas generalmente como Virtual Infant Parenting (VIP). Las VIP incluyen también lecciones relacionadas con la salud sexual, la anticoncepción, y los costos financieros de tener un hijo.
Las muñecas realistas imitan los patrones de sueño y de alimentación de un bebé, e incluso lloran. Los proponentes del programan insisten en que atender las exigencias incesantes de la muñeca disuaden a las adolescentes del deseo de quedar embarazadas.
No obstante, las muñecas, que cuestan alrededor de 1000 libras esterlinas (1320 dólares estadounidenses) cada una, son “un uso ineficaz de los recursos públicos”, en opinión de Brinkman.
En 2013, 10,407 adolescentes dieron a luz en Australia –14.6 partos por cada 1000 jóvenes-, según las cifras más recientes de la Oficina de Estadísticas australiana.
“Australia tiene la sexta tasa más alta de embarazos adolescentes entre los 21 países de la OCDE, y este estudio ayudará a los políticos a combatir mejor el problema”, añadió Brinkman.
Las tasas de embarazo adolescente son aun más elevadas en el Reino Unido y Estados Unidos que en Australia, pese a que ambos países han tenido mejoras significativas desde la década de 1990.
En 2015, la tasa de natalidad entre jóvenes de 15 a 17 años en el Reino Unido fue de 21.8 por 1000; en 2014, Estados Unidos registró 24.2 nacimientos por 1000 en el mismo grupo etario.
Suiza ostenta la tasa de embarazo adolescente más baja de todos los países desarrollados: 8 concepciones por 1000, significativamente menos que el Reino Unido, Estados Unidos y Australia.
En términos generales, los países con el menor número de embarazos adolescentes y las tasas de abortos más bajas proporcionan educación sexual adecuada, así como acceso fácil a la anticoncepción.
“Las evidencias demuestran, muy claramente, que la mejor manera de reducir el embarazo adolescente es mediante una educación en sexo y relaciones de alta calidad, la cual incluye empoderar a los jóvenes para que tomen las mejores decisiones personales, en combinación con acceso a servicios anticonceptivos amigables para los jóvenes”, dijo Mel Gadd, de Family Planning Association.
La educación sexual desde temprana edad es fundamental, opina la profesora Julie Quinlivan, de la Universidad de Notre Dame Australia, quien analizó los hallazgos del estudio en cuanto a la eficacia de las muñecas simuladoras de bebés en la prevención del embarazo. Dijo que si dicha educación inicia en la escuela secundaria, ya es demasiado tarde.
Agregó que el programa VIP no resalta los aspectos negativos de ser una madre o un padre adolescente, y que una muñeca no es una representación exacta de lo que representa atender, realmente, a un bebé de verdad.
“La cura del embarazo adolescente es más compleja que una muñeca mágica”, concluyó Quinlivan.
Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek