Rodríguez se enfrentó al representante de Egipto, Hussein Abdin, el cual sacó su lado sucio al pegarle en la parte baja al mexicano y también en la nuca, este último es un golpe conocido popularmente como “de conejo”.
Misael buscó la pelea, pero ya en el tercer round, jugó con la desesperación de su rival, que lo buscaba sin poder conectarlo. Misael fue sancionado debido a que tiró su protector bucal hasta en tres ocasiones, pero afortunadamente para él, esto no fue decisivo.
Tras conocer el fallo de los jueces, que le otorgaron el triunfo por decisión unánime,
El Chino Rodríguez se convirtió así en el primer boxeador mexicano con medalla desde Christian Bejarano en Sydney 2000.
“Mucha satisfacción, es un esfuerzo de años, somos una gran nación y no nos pierdan la fe. Yo quería seguir a Christian Bejarano, me desconcentré un poco pero pude sacarla. Espero poder contagiar a mis compañeros mexicanos y que vean que si se puede. Que todo México no nos pierda la fe”, dijo Misael Rodríguez a ESPN al término de su combate.
Tamara Vega, que competirá en Río en Pentatlón moderno, es novia de Rodríguez y también fue entrevistada por la cadena deportiva.
“Es un gran orgullo, primero por él y para México, todo el trabajo se ve resumido. Lo viví con mucha emoción, se me puso la piel chinita de ver como México se estaba rompiendo el alma. Misael me dijo que iba a ganar, él es una persona con convicción y lo aseguró.
Me da mucho orgullo que México le regale esto a su población, espero que llegue más alto. Tanto él como mis otros compañeros me inspiran con sus actitudes”.
El Chino Rodríguez enfrentará al uzbeko Bektemir Melikuziev el jueves 18 de agosto, por el lugar al gran final. En el boxeo olímpico se otorgan dos bronces, por lo que la presea ya es segura, aunque no se verá reflejada hasta que finalice su participación de manera oficial.
