Puebla, Pue. El exalcalde de Chignahuapan, Lorenzo Rivera Nava, rechazó ser el enviado del líder nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro “Alito” Moreno. Aseguró que si llega como dirigente estatal del PRI en Puebla, será por su trayectoria y no por imposición.
Admitió que mantiene una buena relación con Alito Moreno, pero negó ser el “favorito” que llegó para desplazar al resto de los aspirantes, entre ellos la diputada local Delfina Pozos Vergara, quien incluso rechazó ser dirigente interina para poder competir en la elección interna que se realizará en noviembre.
Proceso de renovación será inclusivo
Dijo que el proceso de renovación para tener nuevo dirigente del PRI Puebla será “inclusivo”, de tal forma que, al igual que él, varios militantes más tendrán la aspiración legítima de representar al partido, con la finalidad de hacerlo competitivo rumbo a los comicios de 2027.
Reconoció que dentro del partido aún existen perfiles valiosos, hombres y mujeres que pueden sumar a la recuperación del PRI. Señaló que él es uno de ellos, pues considera tener la experiencia política necesaria.
“Tengo una vocación política desde hace tiempo; mi perfil, junto a muchos más, en equipo puede hacer que el PRI siga creciendo y sea competitivo para el 2027. Estoy animado en poder ser considerado, siento que estoy siendo considerado”, expresó.
Rivera Nava subrayó que bajo las siglas del PRI ha tenido la responsabilidad de representar a los jóvenes, además de su experiencia como alcalde de Chignahuapan, por lo que confía en que su aspiración será tomada en cuenta para competir por la dirigencia estatal tricolor en noviembre.