De acuerdo con investigadores de la Universidad de Pensilvania, fumar al despertar o hasta 30 minutos después, aumenta la posibilidad de padecer cáncer oral o de pulmón.
En un trabajo publicado en la revistaCancer, Epidemiology, Biomarkers and Prevention se explica que las personas que fuman inmediatamente después de levantarse por las mañanas presentan en la sangre niveles más elevados de NNAL (un metabolito del NNK, elemento cancerígeno del tabaco), que los fumadores que consumen el primer cigarro media hora o más después de despertarse.
Los investigadores que participaron en el estudio analizaron los datos de casi dos mil fumadores que participaron en la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de Estados Unidos, mismos que otorgaron una muestra de orina para medir sus niveles de NNAL.
De acuerdo con la encuesta, el 32% de los participantes fuman 5 minutos después de despertarse, el 31% entre 6 y 30 minutos más tarde, 18% lo hace entre 31 y 60 minutos posteriores y el 19% fuma más de una hora después de despertar.
Las pruebas revelaron que la presencia de NNAL es más alta en aquellas personas que fuman a los pocos minutos de despertar. Además, también se encontró que los niveles de NNAL también están relacionados con la edad de los fumadores.