El presidente de la Coordinadora de Transporte de León, Daniel Villaseñor Moreno, informó que los accidentes viales en los que participa el transporte urbano en la ciudad registraron una disminución del 71%, resultado de mejoras operativas y de seguridad; sin embargo, advirtió que la principal problemática actual se concentra en los percances donde están involucradas motocicletas.
“Cerramos el año con una disminución del 71% en los accidentes donde participa el transporte urbano, y es importante aclarar esa parte”, subrayó.
Pese a esta reducción general, Villaseñor Moreno alertó que, desde hace tres años, el 50% del total de los accidentes del transporte público involucran a motociclistas, y que en el 100% de esos casos la responsabilidad ha sido del conductor de la motocicleta.
“No quiero satanizar a los motociclistas, pero el número es muy claro: el incremento en la cantidad de accidentes donde participa la moto es brutal y algo tenemos que hacer como sociedad”, señaló.
El dirigente explicó que las principales causas de estos accidentes son pasarse los altos, circular entre carriles, invadiendo los puntos ciegos de los autobuses, así como el exceso de pasajeros en motocicletas.
“Son vehículos que tienen derecho a un carril completo y no ejercen ese derecho. Rebasan entre autos, entre carriles, y ponen en riesgo su vida y la de quienes llevan atrás; hemos visto motos con cuatro, cinco o hasta seis personas, lo cual está prohibido por la ley”, afirmó.
Villaseñor Moreno enfatizó que los autobuses cuentan con zonas de nula visibilidad mucho más amplias que las de un vehículo particular, situación que muchos motociclistas no consideran.
“Ellos infieren que por ir entre carriles todo mundo los va a ver, pero no es así. No es que el operador no quiera verlos, es que no los ve y, además, en teoría no deberían de ir por ahí”, explicó.
Otro factor crítico es el uso inadecuado del casco. De acuerdo con el líder transportista, casi el 70% de los accidentes con motociclistas se relacionan con la falta de un casco adecuado o certificado, pese a que ya existe una regulación estatal.
“El problema es que la ley se vuelve letra muerta. Sigues viendo gente sin casco, seguramente sin casco certificado, y con tres, cuatro o cinco personas arriba de la moto”, lamentó.
Finalmente, Villaseñor Moreno llamó a reforzar la regulación, vigilancia y concientización, al advertir que, aunque no siempre se registran accidentes gracias a maniobras de emergencia de los operadores, el riesgo es constante.
“Nuestros operadores hacen maniobras de pánico entre cinco y diez veces al día por motociclistas, ciclistas o peatones. Eso no se sabe porque no pasa el accidente, pero el peligro está ahí todos los días”, concluyó.