El asesinato de Carlos Manzo Rodríguez, presidente municipal de Uruapan, Michoacán, generó reacciones en distintas entidades del país. Desde Durango, el gobernador Esteban Villegas Villarreal lamentó el ataque y expresó solidaridad con la comunidad michoacana, al señalar que hechos de este tipo impactan más allá del ámbito político.
“Este acontecimiento nos mueve a todos como personas. Es verdaderamente lamentable lo que sucedió”, declaró el mandatario duranguense, quien consideró que la violencia en Michoacán no es un tema reciente, sino una problemática acumulada durante años.
Villegas Villarreal hizo un llamado a fortalecer la coordinación nacional para enfrentar los desafíos en materia de seguridad pública. Refirió que este tipo de hechos generan preocupación y exigen respuestas conjuntas entre los tres niveles de gobierno.
“Si creen que nosotros podemos ayudar en algo, estamos listos. Al final, estamos hablando de México y no queremos que se hable del país de esta manera”, dijo al insistir en que la cooperación debe prevalecer por encima de diferencias políticas.
El gobernador reiteró que la seguridad es un tema dinámico donde las condiciones cambian constantemente, por lo que insistió en la importancia de estrategias integrales y de largo plazo para prevenir situaciones similares en otras regiones del país.
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