UN RÉCORD HISTÓRICO DE BEBÉS NACIDOS DE PADRES EXTRANJEROS SE REGISTRÓ EN JAPÓN EL AÑO PASADO, según nuevas estadísticas del gobierno, en medio de los cautelosos esfuerzos por cubrir los vacíos que deja el rápido envejecimiento de la población.
POR QUÉ IMPORTA
Japón enfrenta un futuro incierto mientras su tasa de natalidad continúa disminuyendo, como ocurre en muchos países de ingresos altos y medios. Las personas mayores de 65 años representan ya cerca del 30% de la población de 125 millones de habitantes, lo que genera temores sobre la vitalidad a largo plazo de la cuarta economía más grande del mundo.
Conocido durante décadas por sus estrictas políticas migratorias, el país ha relajado gradualmente las reglas de visado para atraer trabajadores a industrias con graves escaseces de mano de obra, como la manufactura y el transporte, sectores que los jóvenes japoneses evitan cada vez más.
Estas medidas han tenido cierto éxito: en 2024, Japón registró el mayor número de residentes extranjeros de su historia por tercer año consecutivo, alcanzando casi 3.8 millones de personas nacidas fuera del país con residencia legal, según datos del sitio japonés Nippon. Newsweek contactó por correo electrónico al Ministerio de Asuntos Exteriores de Japón para solicitar comentarios fuera del horario laboral.
LOS DATOS CLAVE
El año pasado se registraron 22,878 nacimientos de padres extranjeros (ya sea de parejas casadas o de madres no casadas), informó el diario Nikkei, citando nuevas cifras del Ministerio de Salud. Esto representa un aumento de más de 3,000 nacimientos respecto a 2023.
La cifra equivale a poco más del 3% de todos los bebés nacidos en Japón ese año, también un récord. Las madres chinas encabezaron la lista con 4,237 nacimientos, seguidas por las brasileñas (1,807) y las filipinas (1,351).
El número de bebés nacidos de padres extranjeros compensó más de la mitad de la caída de los nacimientos entre padres japoneses, que descendió en 41,115 casos, hasta 686,173, el nivel más bajo desde que existen registros, según el informe.
Algunos analistas han pedido políticas más sólidas para apoyar e integrar a los niños y familias extranjeras en la sociedad japonesa, advirtiendo que sin esas medidas las divisiones podrían profundizarse aún más.
QUÉ DICEN LOS EXPERTOS
Toshihiro Menju, profesor visitante de la Universidad de Estudios Internacionales de Kansai, dijo a Nikkei:
“Necesitamos políticas para crear una sociedad en la que los niños extranjeros, cuando crezcan, hablen japonés, ganen tanto como los ciudadanos japoneses y puedan mantener a sus familias. De lo contrario, tendremos una sociedad dividida.”
LO QUE VIENE
Está por verse cómo la llegada al poder de la primera ministra conservadora Sanae Takaichi influirá en la política migratoria japonesa.
Takaichi ha pedido una “represión contra la inmigración ilegal” y restricciones más severas a la propiedad extranjera de tierras, posturas que podrían ralentizar el impulso hacia un Japón más abierto y favorable a los migrantes. N
(Con información de Newsweek Internacional / Micah McCartney)