TRUMP PIDE EL NOBEL DE LA PAZ, renovó su aspiración al Premio en un discurso combativo ante la Asamblea General de la ONU. El presiente se presentó como el gran pacificador mundial mientras cuestionaba al propio organismo y atacaba la inmigración en Europa.
En su primera intervención ante líderes internacionales desde su regreso a la Casa Blanca, afirmó haber “terminado siete guerras interminables” en los primeros meses de su segundo mandato y sostuvo que por cada logro merecería el Nobel. El mandatario citó conflictos en Camboya y Tailandia, Kosovo y Serbia, y tensiones entre Israel e Irán, atribuyéndose el mérito de haber salvado “millones de vidas”.
INTERVENCIÓN EN LA ASAMBLEA
El discurso, que superó ampliamente los 15 minutos asignados a cada líder, tuvo el tono de un mitin: mezcló relatos de logros económicos y políticos con críticas a gobiernos aliados y a la ONU.
Trump apenas mencionó la guerra en Ucrania, a pesar de haber prometido ponerle fin al regresar al poder, y criticó a algunos aliados que reconocieron al Estado de Palestina, al decir que eso equivaldría a “premiar a Hamás”.
El presidente se comparó con el Nobel pasado: “Todo el mundo dice que debería ganar el Premio Nobel de la Paz”, aludiendo a Barack Obama, ganador del galardón en 2009. También presumió datos de la bolsa, encuestas y su política migratoria como parte de una narrativa de restauración de “paz y prosperidad” similar a la de su primer mandato.
ATAQUES A LA ONU Y A LA AGENDA GLOBAL
Más allá de autopromocionarse, Trump descargó fuertes críticas contra la ONU: señaló que la organización no resolvía conflictos y se limitaba a emitir “cartas muy contundentes” sin efecto práctico. “Las palabras vacías no terminan las guerras”, afirmó, además de burlarse de la remodelación de la sede en Nueva York y de problemas técnicos con el teleprompter.

El mandatario también desestimó el cambio climático como un “engaño” y calificó la combinación de inmigración y políticas de energía renovable como un “monstruo de dos cabezas” que, según él, está “arruinando” a Europa Occidental.
“La inmigración y las ideas suicidas sobre energía serán la muerte de Europa Occidental”, dijo en un pasaje que buscó advertir a otros gobiernos para que sigan el modelo estadounidense.
Es inusual que un jefe de Estado haga una petición pública para ganar el Nobel en el debate general de la ONU, foro pensado para la diplomacia multilateral sobre cambio climático, proliferación nuclear y cooperación internacional. El Premio Nobel de la Paz 2025 se anunciará el 10 de octubre en Oslo.
La intervención mostró la voluntad de Trump de romper normas diplomáticas y de buscar reconocimiento internacional incluso mientras cuestiona las instituciones que lo otorgan. Ese contraste plantea dudas sobre el impacto real de su política exterior: ¿promueve la paz o fragiliza los mecanismos multilaterales que facilitan acuerdos duraderos? N
(Con información de Newsweek Internacional)