La industria de la construcción, responsable de generar casi el 8% del Producto Interno Bruto (PIB) a nivel nacional y de emplear a cerca de 5 millones de personas en todo el país, también afronta un importante reto económico por las políticas arancelarias del Gobierno de Estados Unidos, reconoció Luis Méndez Jared, presidente nacional de la Cámara Nacional de la Industria de la Construcción (CMIC).
Inicialmente, se reporta un incremento del costo en un 5% en la edificación, del 4% en la vivienda y hasta de un 10% en la infraestructura, pues este sector consume, aproximadamente, el 70% de la producción de acero, el 50% del aluminio y 30% del cobre.
“No hay afectación directa, pero la especulación sí ha hecho que muchos proyectos entren a una pausa, por decirlo así. Sabemos que el valor de las empresas constructoras cayó un 16% y ya veníamos de otra caída cercana al 15%, pero hace 8 meses la caída fue de un 24%, entonces eso nos está manteniendo con una expectativa aún positiva” señaló.
Otro reto cada vez es más vigente, es la gentrificación, que ha encarecido el costo de la vivienda y disminuido la posibilidad de que las personas compren o construyan un hogar, lo que les obliga a vivir como arrendatarios y relegados a zonas donde su presupuesto se los permite.
” Hoy en día se necesitan casi 36 millones de viviendas y en el 2050 se van a necesitar 55 millones, entonces el tema de la gentrificación empieza a suceder en urbes como Guadalajara y Monterrey, el suelo empieza a encarecerse y lo que antes era un sueño, ahora se está esfumando. De seguir así, en los próximos 20 años el 50% de las viviendas serán rentadas” señaló.
Según el Censo de Población y Vivienda del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México hay 35,219,141 viviendas particulares, habitadas en el país. Según estimaciones, en 2050 se contará con 55,404,580 hogares, esto representa 12.5 millones más que en 2030 y 19.4 millones más que en 2020.