Se triplican los grupos anti-musulmanes en EE.UU.

El número grupos de odio en los Estados Unidos aumentó por segundo año consecutivo en 2016 al pasar de 917 frente a 892 en 2015, plantea el censo anual del Southern Poverty Law Center (SPLC) de grupos de odio y otras organizaciones extremistas.

El documento dado a conocer este miércoles muestra que el crecimiento más dramático fue la casi triplicación de grupos de odio anti-musulmanes los cuales pasaron de 34 en 2015 a 101 el año pasado.

El crecimiento de estos grupos de odio ha sido acompañado por una serie de crímenes contra musulmanes, incluyendo un incendio provocado en una mezquita en Victoria, Texas, apenas unas horas después de que el gobierno de Trump anunciara una orden ejecutiva suspendiendo los viajes de algunos países predominantemente musulmanes.

Las últimas cifras del FBI refieren que los crímenes de odio contra musulmanes crecieron un 67 por ciento en 2015. El aumento del odio contra los musulmanes fue alimentado por la retórica incendiaria de Trump, incluyendo su promesa de campaña para prohibir la entrada de musulmanes a Estados Unidos, así como la ira por ataques terroristas como la masacre de 49 personas en un club nocturno gay en Orlando, precisa el documento.

“Este 2016 fue un año sin precedentes para el odio”, dijo Mark Potok, investigador principal y editor del informe de inteligencia. “El país vio un resurgimiento del nacionalismo blanco que pone en peligro el progreso racial que hemos hecho, junto con el surgimiento de un presidente cuyas políticas reflejan los valores de los nacionalistas blancos”, comentó.

La organización encontró además que en los primeros 10 días después de la elección de Donald Trump se documentaron 867 incidentes relacionados con sesgos, incluyendo más de 300 que atacaron a inmigrantes o musulmanes.

Además, en una encuesta post-electoral de 10,000 educadores, el 90 por ciento dijo que el clima en sus escuelas había sido afectado negativamente por la campaña.

El ochenta por ciento describió la ansiedad y el miedo aumentados entre estudiantes, particularmente inmigrantes, musulmanes y afroamericanos. Numerosos maestros informaron además sobre el uso de insultos, lenguaje despectivo y símbolos extremistas en sus aulas.