Las pequeñas que han quedado en libertad están ahora
con las fuerzas de seguridad nigerianas en la ciudad de Maiduguri, capital del
estado de Borno, en el noreste del país.Según una
fuente gubernamental citada por el medio nigeriano Sahara Reporters, las niñas han sido recogidas por un helicóptero
del Ejército en la zona de Banki, en Borno, donde Boko Haram las había dejado
horas antes. Las menores serán trasladadas a un centro médico para someterlas a
una revisión.
La
liberación se logró gracias a las negociaciones entre el Gobierno nigeriano y
Boko Haram. Un oficial del ejército, enterado en el asunto que pide permanecer
en anonimato porque no está autorizado a informar a la prensa, dijo que los
cuatro dirigentes de Boko Haram presos fueron dejados en libertad el miércoles
por la noche en Banki, cerca de la frontera con Camerún.
Garba Shehu, portavoz de la presidencia, confirmó la liberación,
“facilitada por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y el
gobierno suizo” en un comunicado, sin mencionar canje alguno. El CICR ha
declinado comentar la información pero, según expertos de la región, la Cruz
Roja es un “interlocutor muy creíble” por lo que no les sorprende.
“El
presidente Muhammadu Buhari se felicita de la liberación de las chicas, pero
recuerda a los nigerianos que más de 30 mil ciudadanos murieron por el
terrorismo” de Boko Haram, añadió el comunicado, precisando que pronto se
conocerán los nombres de las liberadas.
El
Movimiento Devuelvan Nuestras Niñas, en su página de Facebook, se muestran
optimistas con la liberación: “Estamos encantados y agradecidos”, y agrega que
están a la espera de conocer los nombres de las niñas afortunadas. “Agradecemos
al gobierno federal y, como Oliver Twist, pedimos más”, sostiene la activista
Hauwa Biu.
En mayo de este año una de las menores logró escapar
del campamento en el que estaban recluidas. Boko Haram, por su parte, aseguró
en un video publicado en agosto que varias de ellas habían muerto en bombardeos
aéreos del Ejército.
En los 14 años de existencia de Boko Haram al menos 14
mil personas han sido asesinadas en atentados y ataques perpetrados por el
grupo terrorista, según los datos de Amnistía Internacional. Ejerce su
violencia contra todos los que considera “no creyentes”, sean o no musulmanes,
entre los que incluye a aquellos que no defienden su ideología radical o
simplemente los que de una manera u otra, colaboran con el Estado: políticos,
religiosos, líderes tradicionales, funcionarios, profesores, médicos,
estudiantes. Los ataques a escuelas y hospitales, que dejan arrasados, son una
de sus prioridades.
Boko Haram, Estado Islámico y otros grupos armados
están impulsando y organizando nuevas formas de esclavitud en una escala no
vista desde la Segunda Guerra Mundial. Así lo asegura un estudio presentado a
principios de septiembre en las Naciones Unidas por un grupo de expertos: “Con
una estimación de 45.8 millones de esclavos, la esclavitud moderna es una de
las tragedias de los derechos humanos más significativas de nuestro tiempo”, advierte
Matthew Rycroft, embajador británico en la lectura del informe sobre el
particular.