Un hombre que aparentemente sufrió un ataque de pánico fue abatido por la policía de Oklahoma dentro de un autobús de pasajeros tras forcejear con un oficial para quitarle su arma.
El hombre fue identificado por la prensa como Miguel Ángel Chávez-Angles. Los mismos reportes indican que el fallecido era mexicano y trabajaba como conductor de un camión de reciclaje.
El caso se registró en junio pasado, aunque ha cobrado relevancia luego de que las autoridades de Oklahoma hicieron público el video del momento en que Chávez-Angles fue abatido.
Las imágenes fueron captadas por una cámara de vigilancia de un autobús el pasado 24 de junio y muestran cómo el hombre aborda el transporte y le pide al conductor que cierre las puertas y siga rápidamente su trayecto.
Sin embargo, el vehículo para su marcha y dos agentes ascienden a la unidad e intentan controlar Chávez-Angles quien tras forcejear con uno de los uniformados es abatido.
De acuerdo con la Policía de Oklahoma, el episodio tuvo lugar cuando respondieron a un reporte de vandalismo. Testigos informaron que vieron al hombre correr hacia un coche desde un lugar donde había otro vehículo golpeado con una roca.
Las autoridades informaron que se trababa de Chávez-Angles quien tomó un vehículo, en el que había dos mujeres, a las que obligó a bajar. El hombre abandonó el auto unas cuadras más adelante y se encerró en un negocio de autopartes.
Un empleado de ese negocio que no estaba allí en el momento del incidente, pero que revisó los videos de seguridad, dijo que el hombre estaba gritando cosas sobre Jesucristo y diciéndole a la gente que checaran las noticias.
Posteriormente el gerente del establecimiento ordenó a Chávez-Angles abandonar el lugar, tras lo cual el hombre abordó la unidad donde sería abatido.
El capitán Paco Balderrama de la policía de Oklahoma dijo a la prensa que el conductor del bus les informó que de inmediato notó el comportamiento extraño del hombre por lo que detuvo la unidad.
“Fue errático. Un poco irracional”, dijo Balderrama al describir el comportamiento de Chávez. “Parecía ser como si (pensara) que alguien lo estaba siguiendo”, comentó.
La televisora local KOCO informó que los dos agentes fueron dados de baja administrativa sin suspensión de sueldo.