Última parada

Donetsk, Ucrania.— Las víctimas de un
mortero rebelde yacen dentro y alrededor de un autobús urbano, atacado el 22 de
enero. Al menos 13 personas murieron, pasando a formar parte del creciente
número de bajas civiles en el actual conflicto entre el ejército de Ucrania y
los separatistas apoyados por Rusia. Naciones Unidas afirma que más de 5,000
personas han muerto a causa de la guerra desde abril. Menos de 24 horas antes
del ataque, los Ministros de Relaciones Exteriores de Rusia y Ucrania se
reunieron en Berlín para firmar un nuevo tratado de cese al fuego en el que se
prometió el retiro de las tropas de ambos bandos.